Sunday, May 04, 2008

Vida

En derroteros filosóficos hemos estudiado la vida desde una prespectiva práctica; me sumaba, como he señalado antes, a la tésis de Maturana y Varela quienes sostienen que algo está vivo si es consciente de su entorno y de alguna manera lo transforma. Esta idea abre las puertas a considerar como vivo a todo ente con capacidad de percepción y de acción... ergo, muchos robots estarían vivos.

Entendiendo que eso me deja un hueco coneptual... al continuar explorando la idea de la vida he derivado en una postura diferente (aclaro de entrada que desconozco si estoy enarbolando una bandera tan vieja y conocida como la ley de gravitación universal... ó tan refutada) que recae en la capacidad de deliveración sobre las acciones que ejecuta el ente mismo y la naturaleza de esas justificaciones.

Si un robot, por muy inteligente que pueda llegar a ser, termina tomando decisiones en razón de una programación matemáticamente establecida e indiscutiblemente cerrada, no puedo considerar que esté vivo... El vivir me supone un acto de reacción a la duda... de manifestación de respuestas... de concreción y expresión de la libertad para acertar y para equivocarse. Estar vivo... es capacidad de aquello que no es perfecto... que no es mecánico, electrónico... ni divino.
Pero de allí mismo entonces derivo en que el acto de estar vivo queda sujeto en mucho al concepto de libertad; porque si un ente orgánico, para ser preciso, no tiene esa posibilidad de decidir... de escoger su propio camino, sin respuestas prefabricadas por otro... puede asumirse tan vivo como cualquier robot industrial ó científico. Aún más dramática se torna la situación cuando el condicionante dejaría el vilo a los privados de su libertad... humanos ó no; por no citar a los "no nacidos" en cualquier especie animal y los tejidos creados en laboratorios... por complejos que puedan llegar a ser. Capítulo aparte me obligan aquellos que por seguir paso a paso las instrucciones de otros hacen de su vida una suerte de aplicación de métodos de salvación... o de perfección irreflexiva.
El tema no es sencillo... comencé estas líneas con un destino... y he llegado a un camino abierto en varias direcciones... Hasta en las que implican los conceptos de disfrute y sufrimiento, de adhesión y rechazo, de satisfacción y frustración... la cosa se complica!!!
Señalé que antes coincidía con Maturana y Varela... ahora me quedé corto.
Debo entender que estoy vivo!!!

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