Thursday, May 21, 2009

El ojo del Turista

¿Cómo identificamos al entranjero que recorre nuestra urbe?

¿Qué señas inequívocas exhiben los turistas en cualquier lugar del mundo?

Para comenzar miran diferente todo lo que nosotros damos por normal; descubren belleza hasta en las piedras más insignificantes de nuestra ruta cotidiana, se detienen con manifiesto interés y curiosidada ver una manada de perros que cruza una plaza y que despertaría en nosotros miedo, detallan hasta el absurdo las fachadas de las casas y templos que simplemente nos ofrecen sombra para caminar...

La mayor parte de mi vida la he pasado en Barquisimeto, una pequeña ciudad del centroccidente de mi Venezuela que no destaca precisamente por ser un destino turístico de primer órden, pero que eventualmente también es recorrida por alguno que otro forastero.

Pero por fortuna... he sido turista!

Mis pasos han servido para recorrer calles de diferentes latitudes y mi bocota se ha abierto en demasía ante mucho edificio habitual para los lugareños. También he sentido la emoción, poco agradable por cierto, de la amenaza de rincones extraños y de individuos más raros que un gato verde (como acotaría el Periquito).

No obstante, el motivo de estas líneas es por la ventaja que significa esa percepción de extraordinariedad que para el turista resulta natural. Esa perspectiva hizo que viviera 3 magnificos años en Caracas... siempre me seguí sintiendo un extraño, en ningún momento dejé de ver todo tan diferente... tan especial y por ende interesante, atractivo y seductor. En verdad fue un acierto inocente que los dioses me permitieron lograr y mis fines de semana eran de museos, parques y tiendas, como un típico turista! Para bien y para mal me quedó tanto por descubrir que aun teniéndola a míseros 400 kmts (míseros al compararlos con los que me separan de otros destinos anhelados; léase marruecos, españa, nueva inglaterra, escocia, baires...) es una gran ilusión que me causa el acercarme a la sucursal del cielo, aunque sea por trabajo.

Reza un dicho popular que la belleza está en el ojo del espectador... para mí, lo extraordinario está en el ojo del turista.

No comments: